El símbolo del Laberinto como una metáfora de transformación
Con el artículo de hoy pretendo aportarte algunos recursos emocionales con los que transitar los momentos internos y particulares que vivimos los profesionales sanitarios durante la crisis sanitaria del coronavirus.
El Laberinto COVID19
Esta pandemia, que es un laberinto por el caos que nos ha supuesto en nuestras vidas, la estamos transitando TODOS como pueblos, pero también cada UNO como individuos únicos. Y es ahí, en este espacio particular donde vamos a poner atención para que podamos salir reforzados de las circunstancias excepcionales que estamos viviendo en los hospitales y en nuestras vidas como enfermeras. Del Laberinto COVID19.
Me fundamento en mis recursos y experiencia humana con Arteterapia, Expresión del cuerpo y Mindfulness entre otras herramientas. También en el trabajo publicado de la Dra. Fina Sanz Ramón a la que hago referencia por tomar la idea del laberinto como símbolo. Y os comparto el proyecto EMOCOVID del grupo de investigación de la Universidad de Almería, Union de Alegría, Universidad Alfonso X El Sabio y la Universidad Autónoma de Chile con la que colaboro en una nueva investigación que pronto os haré llegar.
Porque quizás el Laberinto COVID19 que vivo yo es una extensión del Laberinto COVID19 que vives tú.
¿Qué es un laberinto?

A lo largo de la historia y en diferentes culturas se ha utilizado el laberinto como símbolo para descubrir un viaje, un camino. Como por ejemplo el ciclo de la vida, el camino del embarazo al nacimiento, el camino a Jerusalem etc… Es ese viaje que se ve, el de ahí afuera representado en petroglifos y suelos de iglesias para representar desde esa estética el camino a seguir en etapas de la vida.
Pero como en muchos de los procesos humanos está lo que se ve y lo que no se ve.
Existe también el laberinto del a dentro, (el Laberinto COVID19 es uno), que es esa situación caótica que se presenta de repente y vivimos como un viaje que no sabemos lo que nos vamos a encontrar pero sí o sí tenemos que hacerlo.
Durante este laberinto COVID19 confuso en el que nos encontramos, nos hacemos preguntas como:
- ¿Por dónde tirar?
- ¿Quién me puede ayudar?
- ¿Cómo salir del laberinto?
Quizás te hayas hecho estas preguntas en cuanto supiste del covid19 y sus efectos devastadores en la salud y las vidas en general de las personas. Empezaste a buscar información y soluciones a lo que estaba llegando. Yo por ejemplo me dediqué a recoger información por Internet durante mi primera semana de confinamiento en casa y la compartí escribiendo mi experiencia con una entrada al blog. Puedes acceder a ella aquí. Sé que ha servido a muchas personas. Así me lo hacéis llegar con vuestros mensajes y comentarios. Estoy muy agradecida.
En seguida me di cuenta de que un exceso de información y de noticias estaba saturando mi propia percepción de la realidad. Así es que elegí distanciarme del ruido exterior y centrarme en mi mundo interior. Precisamente para aportar con consciencia en ese otro mundo exterior.
Raquel Franco
El Mindfulness para afrontar el Laberinto COVID19
La práctica a diario del Mindfulness me ha ayudado muchísimo a mantener mi mente en calma y centrar mi atención a lo verdaderamente importante durante la pandemia y mi propio Laberinto COVID19. Cada día por la mañana y antes de irme a dormir lo practico. Te dejo aquí una meditación guiada regalo de Nirakara.
Y es que somos 7625 millones de personas (población mundial) que estamos en confinamiento y reduciendo de golpe nuestra vida a lo más pequeño, aislándonos para mantener la seguridad. Pero recordemos que somos seres sociales y necesitamos expresarnos, comunicarnos…
Como dice la Dra. Fina Sanz Ramón en su conferencia El laberinto como oportunidad de transformación :
En la vida, no te metas en situaciones laberínticas de gratis porque la vida misma ya te meterá, quieras o no quieras y con las que la vida te va a colocar, tienes más que suficiente.
Y si estás en un laberinto ya metida como por ejemplo:
- La muerte de un ser querido.
- La violencia de género.
- Las drogas.
- O el laberinto de una enfermedad grave…
Tienes que saber que para salir de él necesitas aprender de ti y transformar eso que vives en otra cosa. De ese dolor que sientes entusiasmado Laberinto COVID19 sácale el aprendizaje que conlleva transitar por este viaje. Si no, no sales de él y das vueltas y más vueltas perdurando tu sentir en el tiempo. Los resultados no son entonces idóneos ni para ti, ni para la humanidad.
El COVID 19 como viaje laberíntico
Tomamos la pandemia COVID19 como el Laberinto COVID19 personal que nos ha metido mucho miedo a todos, pero especialmente a los profesionales sanitarios, por estar en primera línea de «batalla». Hay quienes nos llaman guerreros o héroes. Yo prefiero continuar enraizada en la madre Tierra mostrando al mundo que simplemente somos personas que hacemos nuestro trabajo, cuidar con amor y humanidad.
Este artículo tiene la intención de que podamos respondernos a las siguientes preguntas y aportarte recursos emocionales para que encuentres los recursos internos que están presentes ante la verdad de la pérdida
- ¿Cómo vivir el caos que ha llegado sin habernos avisado?
- ¿Qué hacer frente este estado de shock o este trauma?
- ¿Cómo, en una situación así, querer o poder ayudar a otras personas que están en estas circunstancias?
- ¿Cómo cuidarnos cuando estamos cuidando a otras personas y durante estas circunstancias tan abrumadoras?
- ¿Cómo nos afecta el dolor ajeno, el laberinto de los demás?
Tienes que saber que lo que estás viviendo como laberinto COVID19, es un viaje personal, que aunque al principio no encontramos su sentido, lo tiene. Poco a poco y a lo largo del camino lo vamos encontrando.
Fases de un Laberinto
Todo laberinto tiene un inicio, un desarrollo y una salida. Aprender a transitar en él es lo que nos ocupa ahora. De esta manera también podrás elegir y tomar acción para trascenderlo.
¿Te sumas a la Transformación Humana?. ¿O por el contrario prefieres mantenerte estática en el bucle del laberinto covid19 sin salida?
El laberinto se inicia porque la vida te lo trae sin avisar; un ismo, un tsunami por ejemplo, o se inicia por los guiones de vida que tengamos.
En este caso que nos encontramos con la pandemia de COVID19 es la VIDA la que nos mete en un LABERINTO.
Quieras o no quieras estás ya en este laberinto COVID19. Nos está arrasando con la economía, la salud, la sociabilidad, la libertad … y una vez metidos en él, vivimos el laberinto propio y que también podemos escuchar y compartir el laberinto de los demás.
Incluso nos está modificando el sistema de trabajo quirúrgico. La «normalidad» anterior al Laberinto COVID19 ya no la vamos a vivir igual. Cambiaran muchas cosas y volver a atrás es inviable. Nos transformamos…
¿Qué hacer ahora cuando estoy dentro del Laberinto COVID19?
Ni idea…
Cuando no sabes qué hacer ni para dónde tirar es cuando se inicia el camino del laberinto COVID19. Así es que enhorabuena en cuanto eres consciente de ello. Porque sólo así empezarás a moverte y dar pasos por él e iniciarás el desarrollo del mismo como propio. Yo estoy recorriendo el mío. Es un camino extrictamente solitario. Solo uno puede hacerlo y en el que nos encontraremos con aliados y con monstruos.
Aliados del Laberinto COVID19
Son aquello o quienes nos ayudan en el tránsito. Que nos conectan con nuestra energía para avanzar. Que nos aportan herramientas que nos son útiles y facilitan la salida. Por ejemplo es todo aquello que por internet estás adquiriendo de información o formándote para hacer frente los efectos del COVID19 en la sanidad. También lo somos aquellos compañeros que estamos compartiendo información y ayudándonos los unos a los otros en la creación de protocolos para nuestra actividad asistencial en época de pandemia. Nos sustenta la solidaridad y la cooperación. Y aquellos recursos como las artes plásticas, un buen libro que suma en desarrollo personal, practicas meditativas, alimentación saludable …
Monstruos del Laberinto COVID19
En sentido simbólico, son aquellas personas, animales o cosas que durante el camino nos ponen más obstáculos, dificultades y nos restan mucha energía.
Es todo aquello que decimos en comunidad científica cuando sentimos rabia por la falta de EPIs. Son aquellas personas y colegas que critican o juzgan si estás trabajando tanto como ellos o estás en casa aislado, sin arriesgar, como lo hacen ellos…
Son todas las barreras que nos ponemos pero que también nos ponen por la mala gestión ante tanto caos. El estar constantemente conectado a las redes sociales o las noticias por ejemplo.
El Duelo como proceso
Y durante este viaje pasamos por muchos duelos porque tenemos que despedirnos de muchas cosas. De la libertad que nos proporcionaba el sociabilizarnos presencialmente y sin la tecnología de por medio. Además ahora vamos disfrazados con todas esas capas de materiales sintéticos homologados en nuestros cuerpos para protegernos del virus durante tantas horas en contacto con él y el cuidado de otros seres humanos.
Ansiamos una libertad que empieza aceptando todas las partes de tu ser. Necesitamos pues abrirnos a nuestros propios estados emocionales para abrirnos a otros si queremos seguir anteponiendo la dignidad del ser.
¿Qué son los duelos y por dónde se pasa cuando estamos haciendo un duelo?
El duelo es una despedida de algo o alguien que existía y ya no existe. Algo que se cierra. No es fácil porque no queremos dejar ir, soltar. Nos cuesta cerrar etapa porque no nos han enseñando para ello.
Por ejemplo:
- Dejar ir la libertad de salir de casa cuando queramos.
- De tocarnos, abrazarnos, darnos besos y relacionarnos tal y cómo lo hacíamos antes de que llegara el covid19.
- De crear economía con las estrategias que llevábamos a cabo mientras podíamos.
- O de sentir seguridad en relación la salud…
Cuando estamos elaborando un duelo empezamos por un desamor o frustración de las propias expectativas; «esto yo no me lo esperaba».
Tener que tratar a las personas con tantas capas en mi cuerpo que impiden la fluidez de comunicar no estaba dentro de mi rutina; ni se ve bien la mirada de mis ojos, mi sonrisa, ni tampoco puedo estar a menos de 1 metro de distancia para tocar otro cuerpo si es necesario.
Tampoco me esperaba sentir miedo a contagiarme o contagiar a los demás porque no sé si el virus está cerca o ya dentro de mi cuerpo. Miedo a llevar el virus del hospital, donde estoy trabajando al 400% , a casa, con la familia.
Y verme operando de traqueotomías a pacientes críticos jóvenes de covid 19 positivo con tanta frecuencia. Un procedimiento de alto riesgo de contagio por la exposición al aerosol que hay que me ha tocado lidiar durante muchos días.
Y seguro tú que me lees, tienes muchas otras expectativas frustradas en tu vida y aparecen nuevos retos que no sabes por dónde empezar a caminar.

Durante las fases del duelo sentimos una sensación de perdida o vacío que incluso podemos localizarlo en nuestro cuerpo, por ejemplo en la zona del pecho. Un vacío sentido porque pierdo mis expectativas. Y aparecen otras que se han colocado en mi vida sin avisar.
Y es cuando sentimos una sensación de muerte simbólica (algo que muere en mi) que nos pone presencia de que estoy de luto; me estoy despidiendo de algo o alguien y como bien sabemos este luto no se hace con la cabeza sino emocionalmente.
Es un proceso que tiene unas fases que no necesariamente van en orden aunque a veces sí, y que podemos estar pasando de una a otra fase mientras dure.
Una práctica que quiero compartir contigo para que sientas tu propio sostén antes de que sigas leyendo:
EJERCICIO MEDITATIVO
- Elige un espacio seguro y ponte en una postura cómoda.
- Respira profundamente poniendo atención a tu cuerpo; inhala, exhala… siente tu respiración.
- Pon atención a una zona de tu cuerpo donde sientas bien la respiración como es las fosas nasales o el abdomen.
- Tras unos 10 minutos meditativos pon tus manos en el corazón, una encima de la otra de manera que te sientas sostenida y di en voz alta o para ti las siguientes afirmaciones: «Afronto plenamente la vida y la muerte, la pena y la pérdida». «Acepto que la pérdida es parte de la vida». «Ofrezco amor sabiendo que no puedo controlar el curso de la vida, el sufrimiento o la muerte.
- Respira profundamente, siente tu pecho… siente todo tu cuerpo
- Empieza a movilizar las extremidades poco a poco y abre los ojos cuando creas estar preparada.
Al finalizar la práctica, en ese momento de soltar, de paz que sientes en tu interior dedícalo al bienestar de otros, agradeciendo.
Fases del duelo
NEGACIÓN
«Nome quiero enterar», «No es posible», «No lo quiero ver», «No me lo creo».
IRA
Rabia, enfado contra el mundo o contra lo que sea de esta situación…
NEGOCIACIÓN
«Si yo soy buena y ayudo, quizás…»
DEPRESIÓN
«Pobre de mí, qué desgracia la mía», «Lo he intentado todo y no hay nada qué hacer», «La vida se ha acabado para mi»…
PSEUDOACEPTACIÓN
«Estás cosas pasan…» Esto lo digo con la cabeza, a nivel racional pero no he hecho el proceso emocional.
Y con estas cinco fases voy saltando de una a otra; lloro, me enfado, intento racionalizarlo, negocio, lo niego…
Hasta que pasamos a la fase de ACEPTACIÓN que es un estado de PAZ conmigo misma cuando ya siento que se ha acabado y no solo lo digo desde lo racional sino que lo digo desde el SENTIR. Ya me he enfadado con todo y todos con los que me tenía que enfadar, ya he llorado todo lo que tenía que llorar y me digo «esto es lo que hay». Ya me puedo ver a mí misma por dónde he pasado (veo el laberinto). Lo puedo ver porque ya no estoy ahí, en él.
Sólo puedo ver el laberinto en el que he transitado cuando soy capaz de tomar distancia y observar por dónde he pasado y esto es posible cuando he salido del laberinto.
Es cuando entramos en una nueva etapa, en la que tenemos apertura y está en conexión con la RESILIENCIA que es el AGRADECIMIENTO. Ya puedo ver por donde he pasado del laberinto, el dolor que he sentido y lo que he aprendido de mí. Me he transformado y por eso he salido del laberinto. Por ello agradezco a la vida la enseñanza que me ha dado.
Cuando transitamos por el laberinto y salimos de él, lo hacemos transformados por el aprendizaje de nuestro ser. Sabemos que se sale del laberinto y además se sale trasformado y en otro lugar.
De esto trata, de salir transformada de este viaje laberíntico que nos ha traído el COVID19 a nuestro sistema de salud y a nuestras vidas.
RECURSOS HUMANÍSTICOS
ANTES DE SALIR DE CASA
Estimula los químicos de la Felicidad de tu cerebro de forma natural
DOPAMINA | OXITOCINA | SEROTONINA | ENDORFINA |
Duerme 8h | Medita | Agradece todos los días | Pinta, baila |
Celebra logros | Abraza a tu mascota | Conecta con la Naturaleza (plantas en casa) | Ríe con tus seres queridos |
Haz ejercicio físico | Haz un acto de generosidad | Recuerda buenos momentos | Crea… |
Haz tu rutina matinal
Yo lo llamo mis rituales. Cada mañana me levanto a las 5:00h de la mañana para crear mi espacio y:
- Sentir mis pies enraizados en el suelo mientras respiro de forma consciente.
- Hacer mi saludo al Sol (Yoga).
- Realizar mi sesión de TRE dos veces por semana.
- Tomar mi agua tibia con zumo de limón, jengibre y miel.
- Preparar mi menú Healthy: batido verde y tarro healthy para tomarlo en los healthybreak en quirófano.
- Invocar la intención del día mientras me ducho.
- Meditar y salgo de casa con una sonrisa 🙂
MIENTRAS TE PONES EL EPI

Pongamos valor a la dignidad del ser humanos
Siempre hay un momento para ponerme atención a mí misma, a mi espacio interior cuidando de él, manteniéndolo en calma ante tanto caos ahí fuera. Contribuyo así en el equilibrio de ese otro espacio de interpelación con el exterior carente de serenidad.
Rompamos la cadena de contagio por covid19 con nuestra conciencia de higiene y lavado de manos pero también poniendo más que nunca nuestro corazón en ellas.
Tips mientras te colocas y te quitas el EPI:
- Realiza varias respiraciones profundas mientras te recoges el pelo y vacías tus bolsillos de tus pertenencias.
- Comparte con el resto del equipo que estás preparada y que juntos y unidos vamos a realizar el procedimiento de alto riesgo con idoneidad y excelencia.
- Di en voz alta el paso de la secuencia del checklist y mira a los ojos a todos tus compañeros mientras sientes tu propia respiración.
- Ocúpate de ti primero en la colocación del EPI y en la retirada asegurándote que has realizado con éxito el paso y luego ayuda a tus compañeros a que hagan lo mismo.
- Cuando todos finalicemos el paso de secuencia, vayamos a por el siguiente comprobándonos los unos a los otros.
- Mantener la atención a nuestra propia respiración. Incluso visualizando cómo lo hacemos desde la planta de los pies. Inspirando a través de ellos y espirando el aire también. Esta es una manera de arraigarnos y no permitir que nuestras emociones (miedo) nos secuestren y dificulten nuestra concentración.
- Recordemos estar unidos durante todo el procedimiento quirúrgico de alto riesgo de contagio y comunicar al resto de compañeroscompartiendo información de lo que hacemos, o de las alarmas que se presentan.
- Antes de la retirada del EPI, realizamos la técnica de respiración 4-7-8. Consiste en realizar 4 respiraciones seguidas, no más, y profundas contando hasta 7 para la inspiración, retener 4 segundos y contando 8 para la expiración. De esta manera estimulamos el nervio vago y equilibramos nuestro sistema nervioso que está más en modo simpático (alerta) que en parasimpático.
- Durante la retirada del EPI respetemos los tempos de cada uno. Empezando por el propio y seguimos los pasos sin prisa.
- Yo controlo el traje, el traje no me controla a mi. Yo decido cómo me siento dentro de ese EPI y cuando sienta que no puedo más y quiero salir, recurro a mi respiración consciente
CREO EN CREAR DURANTE MI LABERINTO

Con el proceso creativo que una pintura o el movimiento libre y sentido del cuerpo podemos conectarnos con todo aquello que hemos pasado en el hospital, desapercibido a nivel consciente, pero que la obra nos lo cuenta cuando la realizamos y la observamos. Me dice mucho de mi, qué me pasa y aprendo de ella. Así la transición por la que paso en mi laberinto es más fácil. Simplemente necesito permitirme crear mi espacio para ello. Para pintar, dibujar sin autoenjuiciarme o para mover y sentir mi cuerpo libremente sin juicio alguno, permitiendo expresar toda emoción que surja.
Mientras creo, ya sea una danza o una pintura, mi mente está en calma. Permito así que mi ser se exprese desde el sentir y de esta manera vuelvo a mantener equilibrio nutriéndolo para seguir este camino resiliente que vivo como persona y profesional sanitario en la primera linea.
El cuerpo como vehículo para llegar a las zonas profundas del ser
A través del movimiento sentido del cuerpo liberamos emociones y podemos ser nosotras mismas sin ningún prejuicio, sin juzgarnos a nosotras mismas. Es un espacio donde puedes crear tu propio mundo apoyándote en tu mundo interior y en el mundo exterior. Dos mundos que puedes unir a través de tu propio proceso creativo a través del movimiento.
El movimiento sana heridas profundas y pone mas fácil el transitar por el camino de la vida. Ayuda a sentirte cuando no puedes hacerlo y te ayuda a conectar con esa parta más inconsciente cuando con la palabra no puedes llegar. El cuerpo te guía a ese lugar donde tu corazón sabe. Poder ser para luego dar. Dar lo mejor de ti durante el cuidado de los demás.
Y sí, yo en particular comparto la obra con todos vosotras muy agradecida. Agradecida de permitirme este espacio libre de juicio cuando lo llevo a cabo y dandole sentido en cuanto sirve de inspiración para ti que me lees. Permitámonos ser, aún la vulnerabilidad de la esencia humana que somos.
¡El arte es terapia!.
Y es un elixir para nuestro autocuidado. Porque en esta crisis sanitaria que vivimos en global, nuestros cuerpos están castigados por el efecto devastador de este coronavirus que ha parado con la inercia de todo un sistema sanitario, aunque nuestra alma sigue siendo libre. Permitámonos expresar todo, lo intensamente duro y lo profundamente bello y enérgico de nuestra profesión. Somos dueñas de nuestros destino!.
La arteterapia tiene grandes beneficios en estos momentos porque nos permite expresar lo que no podemos con palabras.
PRACTICA
- Cada día tras tu jornada y cuando vuelvas a casa, permítete un espacio y tiempo para ti. Coge papel y pinturas y deja que tu mano se exprese sin pensar, sin hacer ningún juicio.
- Dos veces por semana, pon música que sientas vibrar con ella y deja que tu cuerpo entre en movimiento. Siéntelo y empieza con tu proceso creativo encontrándote. Fluyendo con las emociones que dejas que salgan y que quizás retuviste durante tu jornada como enfermera.
Comparte si te ha parecido de interés el articulo y cuéntame cómo te está yendo a ti durante la pandemia.
Dibuja, si no sabes por donde empezar, el laberinto que tenías antes de que llegara el Covid 19 a tu vida y el laberinto que tienes ahora con él.
Házmelo llegar por correo, al inforaquelfranco@gmail.com y te asesoraré en tus pasos con mucho cariño. Puedes también compartir el laberinto etiquetarme por las redes sociales (Instagram o Facebook) y añadiendo el hashtag #raquelfrancovalenzuela #laberintocovid19
Aplica en tu vida los recursos que comparto y me cuentas 😉
MÁS RECURSOS EMOCIONALES
PROYECTO EMOCOVID Programa Psicoeducactivo para trabajar el estado emocional de esa población concreta en esta especial situación de confinamiento y de lucha ante el COVID-19. Se ha creado a partir de una investigación previa de los grupos de la Universidad de Almería ‘Intervención psicológica y médica a lo largo del ciclo vital’, dirigido por María del Mar Molero, e ‘Investigación en el ámbito educativo y de la salud’ SEJ-581, por María del Carmen Pérez-Fuentes. El lugar de referencia para poder usarlo es la web www.sej473.com/mequedoencasa.
REFERENCIAS
Beneficios del arteterapia sobre la salud mental.
La intervención arteterapéutica y su metodología en el contexto profesional español.
La influencia de las expresión corporal sobre las emociones: un estudio experimental.
Superbe blog, qui transpire la passion à l’état pur … Zilvia Kip Nanine
Nice article ! Thank you.. Inez Bertrand Saleem