Salud y responsabilidad de ser humanos va de la mano. Aunque a veces vivamos realidades que parecen distantes a la humanización de la sanidad por estar enmascaradas en un exceso de tecnología.
El pasado 8 de Marzo celebramos el Día Internacional de la Mujer. Tarannà Viajes con Sentido lanzaba en su página web la campaña Mujeres Inspiradoras del Mundo con el objetivo de dar a conocer historias de mujeres con impacto positivo en la sociedad.
En Mayo tuve el honor y el placer de ser entrevistada por Marta Vergés, nutricionista, chef y presentadora del programa Menja’t el món (La 2) para dicha campaña.
Mi historia en sí no es importante, lo verdaderamente importante es el aprendizaje que extraje de ella y el romper con el silencio queriendo compartirlo con el mundo. La acción que llevo a cabo a diario para inspirar a más enfermeras a conectar con su propia esencia y la del cuidado me da alas para continuar. Dar valor y visibilidad a mi trabajo humanístico dentro de los quirófanos mediante la dignidad de ser todo lo humano que somos ejerciendo profesionalmente el cuidado, expande el movimiento que empecé y que se pone en marcha por muchas otras enfermeras en cada vez más hospitales del mundo. Desde la Universidad Rovira y Virgili enseño cómo empezar a dar pasos fundamentados con inteligencia emocional en el entorno quirúrgico. Y así continúo generando una comunidad de enfermeras expertas en cuidados quirúrgicos emocionales.
Puedes leer la entrevista haciendo click aquí.
Si crees que pueda serle útil a alguien de tus contactos compártela. Sumaremos así en valor y dignidad para continuar poniendo salud y responsabilidad de ser humanos.
La humanización empieza dentro de uno. Sintiendo la vulnerabilidad de nuestro ser y poniendo el enfoque en aquello que aplicándolo con entrenamiento de nuestras habilidades humanas construye una sociedad sana y equilibrada. En los hospitales necesitamos un ejercito de profesionales sanitarios responsables con su identidad, dignidad de ser.
Hola Raquel, fa molt poc que et conec però espero que sigui per al coneixement I creixement de tothom I també pel meu propi.
Llegin-te he pensat en el primer cop que vaig entrar en un quiròfan, quan vaig donar a llum la meva primera filla, I vaig recordar les formes intempestives d’una madrona que m’escridassava a mi per què jo no cridés de dolor. Per sort un doctor, molt humà, la va fer callar I li va manar o demanar que em deixés cridar tot el que necessités el meu dolor.
També he recordat l’última vegada que he entrat en un quiròfan I els somriures I bromes per animar-me de les infermeres que m’atenien. Gràcies.
Hola Joana, gràcies per compartir la teva experiència quirúrgica. Cada vegada som més els professionals que posem l’atenció que correspón a la dimensió emocional i la dignitat de l’ésser en moments tan vulnerables com és un part o una cirurgia. Les infermeres en sabem molt d’això. La meta amb el meu projecte i feina és inspirar-les a que tinguin molt present la humanitat de la cura en aquest entorn tan hostil com es el quiròfan. Que comparteixis tú per aquí el teu coneixement com a Pacient ajuda a sumar entre tots i cambiar les coses allà on encara no s’estàn fent com es mereixen les persones.
Y si t’han d’operar una altre pegada, contacta amb mi per acompanyar-te des de casa en l’art de cuidar a quiròfan. Et sentirà molt messi empoderada per afrontar la cirurgia.
Una Fort abraçada!